Decidí probar el Sérum Facial de Retinol de Sienna by Nihlo

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A tan solo tres meses de mi cumpleaños número 35 he empezado a sentir una mezcla de emociones para mí un poco extrañas, por ratos la nostalgia me toca la puerta y empiezo un recuento sobre diferentes momentos de mi vida, pero debo reconocer que a veces esa nostalgia se va transformando en presión; presión que, si bien viene influenciada por los estándares de la sociedad, somos nosotras mismas las que inconscientemente nos vamos poniendo sobre los hombros. 

Si, yo sé que suena bastante cliché, pero estoy comprobando que van pasando los años y cada vez más son inevitables las comparaciones, los cuestionamientos y las ganas de cambiarnos, quitarnos o hacernos una que otra cosita que nos haga sentir más confiadas. 

La verdad nunca he sido fanática de tener una rutina de skincare llena de pasos y productos, soy más bien del lado práctico, una buena limpieza, una que otra cremita hidratante, el infaltable protector solar y ¡listo!; pero esta vez quise ir un poco más allá y empezar a buscar otras alternativas que se sumarán a la causa.

En esa búsqueda encontré el Sérum Facial de Retinol de Sienna, para ser sincera al principio me tomé mi tiempo antes de finalmente comprarlo, estaba un poquito prevenida al leer palabras como micropeeling, remoción, tolerancia… y me empecé a cuestionar si realmente valía la pena exponer mi rostro a estas alturas a algo nuevo.

Llegaron preguntas como: ¿y si me irritaba demasiado? ¿y si era muy abrasivo para mi piel? además, sumémosle que bastante delicadita que si tengo la piel y una que otra experiencia no tan chévere he tenido con otros productos de otras marcas. 

Finalmente, y después de una asesoría muy detallada donde me explicaron como debía empezar a aplicarlo de forma paulatina, que siempre debía ser en las noches y que no me podía faltar el Protector Solar al día siguiente, me sentí preparada y empecé a usarlo muy juiciosa, la verdad me dio mucha tranquilidad entender como actuaba sobre mi piel al ser micro-encapsulado y como esto reducía las posibilidades de tener una reacción no esperada.

Desde el primer momento quedé cautivada con lo ligero y suave que se sentía mi rostro, cero tirante o pegajoso y sin signos de ser abrasivo, lo que me dio la total confianza y certeza que había hecho un gran descubrimiento. 

Hoy puedo decir con sinceridad que lo amo, me lo aplico una noche si y otra no, y ya no me puede faltar en mi rutina antes de acostarme, lo más impresionante es que los resultados se notan incluso maquillada, tengo la piel super luminosa, hidratada y las manchitas se han ido desapareciendo.

De verdad que como me hubiera gustado haberlo conocido 10 años antes y haber empezado a usarlo desde el primer momento que es recomendado, pero bueno me queda la satisfacción que encontré un gran aliado anti-edad que se ha convertido en ese infaltable para tener la piel que todas queremos. 

Con mucho amor,

Eli, Nihlover.